CARLOS GUERRA: FLAUTA INDIA DE BAMBÚ
Llevo aprendiendo Bansuri desde hace muchos años y tengo la sensación de que aún estoy comenzando.
Interesado en la Filosofía India, Yoga y Meditación, hice mi primer viaje a la India en Enero de 1981.
Un día, paseando por la plaza más céntrica de Nueva Delhi, escuché tocar a un músico ambulante una larguísima flauta de bambú y me fascinó el sonido que salía de ella.
Decidí entonces conseguir ese tipo de flauta (no sabía ni siquiera el nombre, solo sabía que era una flauta de bambú) y tratar de tocarla, pensando que podría hacerlo, pues en otra época yo tocaba la flauta de pico occidental. Pero no fue nada fácil. Me llevó muchos años adaptarme al Bansuri.
Comencé a estudiar con mi primer Maestro (Guru): Sri Ram Hari Gurung en Nepal. Me enseñó muy bien y con claridad. Después, con los años, comprendí lo buen profesor era.
Cinco años más tarde, fui a Nueva Delhi a continuar mi aprendizaje con Sri Harsh Wardhan. Me dio muy buenas lecciones sobre las técnicas del Bansuri, además de muchas y bellas composiciones.
Siento mucho respeto y agradecimiento hacia mis dos Maestros, con los que he estado aprendiendo alternativamente por más de 20 años.
La Música Clásica de India es una tradición oral, que se transmite de Maestro a discípulo a través de generaciones.
Debemos estudiar y practicar muchos ejercicios musicales, antes de comenzar a tocar cualquier Raga (la forma musical de India) Igualmente, aprendemos muchas composiciones para así tener un mejor conocimiento de los diversos Ragas.
Después de varios años de practicar diariamente, empezamos a comprender el proceso de la improvisación.
Pienso que todo lo expuesto anteriormente y tener una muy buena memoria son factores muy importantes para improvisar. Es muy sencillo. Se trata de sentir cuando tenemos que tocar y cuando debemos estar en silencio.
En India, la Música Clásica es considerada como una forma de Yoga ("Nada" Yoga o Yoga del Sonido) y el músico como un Yogi (un practicante)
El aprendizaje es constante y eterno. En un momento dado, todos partimos de esta vida, pero la Música permanece.
Me interesó la música desde que era un niño escuchando cantar a mi madre y viendo como mi padre y mi madre, bailaban. Ellos lo hacían muy bien, no como yo, que siempre fui un mal bailarín.
Todos sabemos que la música ha estado siempre unida a la vida de los seres humanos por miles de años. En rituales, para dormir a bebés, para celebrar festivales e incluso acompañando el último viaje del espíritu de las personas. Podemos utilizar muchos adjetivos para describir la música, sus orígenes, tipos o estilos, pero lo cierto es que la necesitamos en todo momento.
Y para terminar este pequeño relato, quiero escribir sobre mis mejores amigos: los músicos. He aprendido tantas cosas de todos con los que he tocado o a los que he escuchado, que pienso que son mis maestros y seguiré aprendiendo de ellos hasta el final de mis días.
Gracias a la Música y a mis muchos Maestros.
Carlos Guerra, músico de Bansuri, nacido en Madrid (España)